Aunque “empresa” y “marca” parezcan dos conceptos muy próximos entre sí, hay una diferencia muy grande entre ellos: por un lado, una empresa dedica su actividad a producir o comercializar bienes o servicios, mientras que una marca es la personalidad de esta. De este modo, podemos decir que la primera tiene que ser vendida, mientras que la segunda se vende a sí misma. Por lo tanto, si una marca es la personalidad de la empresa, podríamos decir que el “logotipo” es la cara.
En este momento es importante hacer un inciso: marca gráfica o imagotip son los nombres correctos por el que coloquialmente denominamos “logotipo”. Este término proviene de “logos”, es decir exclusivamente la parte textual (tipográfica o caligráfica) de la marca gráfica. La parte icónica, que se denomina “isotipo”, es un elemento visual gráfico que acompaña al logotipo. Cuando los dos elementos forman un conjunto, este se denomina marca gráfica o imagotip, término que utilizaremos a partir de aquí.
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Mediante un diseño acertado de la marca gráfica podemos comunicar todo aquello que no nos es posible transmitir de manera verbal, pero que queremos que nuestra empresa refleje. Se tiene que tener en cuenta que no solo importa el atractivo estético de la identidad visual, sino que varios estudios demuestran que los consumidores hacen asociaciones complejas de una empresa basándose únicamente en un aspecto aparentemente tan sencillo como la forma de la marca gráfica.
Por ejemplo, estudios de la Universidad Politècnica de Hong Kong demuestran que una marca gráfica circular evoca asociaciones relacionadas a suavidad, hecho que puerta a los consumidores a pensar que una compañía es próxima y sensible a las necesidades de sus clientes. El mismo estudio demostró que una forma angular crea percepciones de durabilidad y fiabilidad. De este modo, el consumidor crea asociaciones a partir de diferentes aspectos visuales de este: como el color, la forma, el dinamismo, el equilibrio, etc., todos estos elementos contribuyen a modificar el juicio que esta persona tendrá de una marca o producto. Por lo tanto, es fundamental elegir con mucho de criterio cada uno de los elementos que conformarán tanto la marca gráfica de tu empresa, como toda la identidad visual corporativa.
También tenemos que tener en cuenta que actualmente los consumidores reciben más estímulos publicitarios que nunca, y aspectos como las ofertas, promociones o especificaciones técnicas de un producto ya no son suficientes para atraer a los consumidores.
“Con el diseño de marca se puede conseguir un vínculo afectivo especial entre el consumidor y marca”
Es precisamente con el diseño de marca que se puede conseguir un vínculo afectivo especial entre consumidor y marca o compañía, para poder crear y mantener una gran ventaja competitiva al mercado y como más se repita el mensaje, mayor familiaridad y proximidad se puede generar.
