Esta Navidad, el entorno digital de las redes sociales nos ha obsequiado con uno de los contenidos más mediáticos del año: el Mannequin Challenge. Un fenómeno que, a través y más allá de una primera mirada distendida y simpática, revela una nueva manera de entender, establecer y mantener la relación entre empresas y clientes.
La competencia por la notoriedad en el entorno digital ha convertido a las campañas publicitarias basadas en estrategias de video, en una de las herramientas más importantes y usadas actualmente. Una tendencia que durante el 2017 irá cada vez más al alza tal como proyectan desde Statista.
“Las campañas publicitarias basadas en estrategias de video serán una tendencia al alza este 2017 para aumentar la notoriedad en el entorno digital.”
La naturaleza participativa, espontánea y lúdica de este espacio de relación -las redes sociales– ha revolucionado los paradigmas de la comunicación. Para las empresas, este nuevo modelo representa la entrada a un espacio de comunicación ágil que permite generar feedback, con el objetivo de entender y hablar con su entorno.
Dejemos atrás la comunicación unidireccional -que muchas veces es percibida como intrusiva- para adoptar la bidireccionalidad, una forma de diálogo en consenso entre todas las partes. Esta dinámica reformulada establece una relación más personal, alejada de las formalidades y con un trato mucho más cercano y resolutivo.
https://www.youtube.com/watch?v=SukNyrMh0Iw”
Se trata de un proceso de personificación de la empresa, en el que la marca se convierte en un miembro activo más de una comunidad: el entorno más directo. Significa, en otras palabras, adquirir una voz importante y reconocida entre todos aquellos que hacen posible o son usuarios de la actividad de la empresa.
“Se trata de un proceso de personificación de la empresa, en el que la marca se convierte en un miembro activo e importante de una comunidad.”
Las marcas han encontrado en el formado video para redes, un potencial mediático mucho más muy dirigido -y por tanto efectivo- al entorno deseado y que a la vez es capaz de llegar a muchas más personas -precisamente por la complicidad de aquellos que forman su entorno-. Se trata de la viralidad de los contenidos.
Teniendo en cuenta que en la red la marca es el calidoscopio de contenidos de la empresa, hay que tener muy presente todo el proceso de producción de los contenidos. El potencial viral de estos, depende en gran medida del planteamiento y desarrollo a cargo del profesional -o equipo de community manager– que cuida de su gestión y la Social Media Optimization (SMO)-.
“Las marcas han encontrado en el formato video para redes, un potencial mediático mucho más bien dirigido -y por tanto efectivo- para llegar al entorno deseado.”
Así pues, el que la comunicación corporativa encuentra en los medios sociales y a través del video es la capacidad de hacer extensiva una identidad a un gran número de personas y, lo que es más importante, hacerlo de una manera más natural y agradable.
Sea lo de cualquier futbolista, el de la serie Merlí de TV3 o el que han grabado tus primos durante la comida de San Esteve, esta Navidad ¿quien no ha dejado entrar un Mannequin Challenge en su casa?
